Hoy, los diarios a lo largo de Chile, en un acto de responsabilidad con la ciudadanía y la fe
pública del proceso electoral, han publicado las nóminas de vocales de mesa. Lo hemos hecho
hecho a pesar de las graves trabas, instrucciones contradictorias y acciones ilegales
emanadas del SERVEL, que a última hora intentó paralizar por segunda vez un acto que se
se encontraba en su fase final de ejecución, aprovechando una modificación legal que llegó en
medio del proceso y que no debía afectarlo.
Durante los días los diarios trabajamos de buena fe y en estricto cumplimiento de las órdenes de
publicación emanadas de las Juntas Electorales que, como instancias locales, están
encargadas del acto de notificación a quienes actuarán como vocales en las próximas
elecciones. En coordinación con ellas y el SERVEL, se diagramaron las nóminas, prepararon
las pruebas de impresión y se ejecutó todo el material de trabajo para la publicación de este
sábado.
Este trabajo incluyó, en muchos casos, instrucciones especiales del propio SERVEL, que
solicitada activamente a los diarios anunciar la publicación de las nóminas en sus portadas,
programado para el día de hoy, generando una legítima expectativa en la ciudadanía.
Sin embargo, a menos de 48 horas de la publicación y con prácticamente todo el trabajo.
materialmente realizado, el SERVEL instruyó ilegalmente “detener la publicación” amenazando
con “no ejecutar pago alguno” por el servicio legalmente encomendado. Esta acción no es solo
es una muestra de profunda desorganización, sino que constituye un acto que vulnera la
confianza legítima, y el cumplimiento de contratos válidamente celebrados bajo una ley
vigente. Si el SERVEL desconociera el trabajo realizado, incurriría en un enriquecimiento
injusto a costa de los medios de comunicación y desautorizando a las propias Juntas
Electorales.
Hemos decidido publicar. No podíamos ser cómplices de un acto que daña al proceso
electoral y que priva a la ciudadanía –especialmente a aquella sin acceso digital– de su
derecho a ser informado. La democracia y la fe pública merecen más seriedad
Mira la declaración aquí:




