Previo a la pandemia, la institución atendía a entre 120 y 180 niñas y jóvenes. Actualmente, sin embargo, la nómina no supera las 15 estudiantes./ EL DÍA Las estudiantes del internado femenino Gabriela Mistral de La Serena, junto a sus familias, viven momentos de incertidumbre respecto a la continuidad del servicio en 2026, luego del traspaso del Liceo Gabriela Mistral desde la Corporación Municipal Gabriel González Videla al Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Elqui.Si bien los funcionarios, tanto inspectores como administrativos, reconocen que, al ser parte de SLEP, podrían ser trasladados a otras funciones, se desconoce si el próximo año continuará el convenio con JUNAEB, que otorga las becas para el mantenimiento de los estudiantes residentes en el hogar. Silvana López Cortés, inspectora del Hogar Femenino Gabriela Mistral, señala que los problemas comenzaron con la disminución en la cantidad de residentes tras la pandemia. “Si antes de la crisis sanitaria teníamos entre 120 y 180 niñas y jóvenes, actualmente la nómina no supera las 15 estudiantes”, relata. Pero hoy el problema es otro. “Nosotros fuimos traspasados a SLEP y no sabemos si el hogar femenino va a continuar. A nosotros como funcionarias no nos han dicho nada, pero no es el tema, porque nosotros somos planta del Liceo Gabriela Mistral y podemos ser reasignadas a otras labores. Pero ¿qué va a pasar con nuestras niñas?”, se pregunta Silvana.CONTINUAR ESTUDIOSEl hogar femenino permite que estudiantes de distintas comunas de la Región de Coquimbo, principalmente rurales y alejadas, así como de otras regiones del país, puedan cursar su enseñanza media en la conurbación La Serena–Coquimbo. Aunque cada familia paga mensualmente 15 mil pesos, “con los que hacemos maravillas”, dicen, la mayor parte de los recursos proviene de JUNAEB. “Es una casa: aquí tienen alimentación, duchas de agua caliente, computación, profesor de reforzamiento, celebraciones, y tiene un sistema de internado los días domingos, y van a visitar sus casas los viernes en la tarde. Los servicios básicos del hogar, desde agua, luz, internet, materiales de aseo y camas, JUNAEB lo da todo, y con la alimentación que es lo principal para nuestros estudiantes”, detalla Silvana López.Actualmente, y hasta diciembre, el hogar estaba bajo el convenio entre la Corporación Gabriel González Videla y JUNAEB. Sin embargo, tras el traspaso al SLEP, no hay un convenio vigente y no se ha manifestado interés por continuar con el programa. “Es una incertidumbre para las familias, y los estudiantes nos preguntan y nosotros no sabemos qué respuesta dar, porque no se nos ha informado y no lo tenemos claro”, subraya la inspectora. A esta situación se suma la demanda de nuevas familias que buscan un lugar para que sus hijas puedan estudiar en La Serena o Coquimbo. Las funcionarias, sin embargo, no saben qué respuesta entregar. El internado acoge estudiantes desde séptimo hasta cuarto medio de distintos establecimientos de la conurbación, como el Liceo Marta Brunet, INSUCO, Providencia y Colegio Japón, entre otros, quienes requieren continuar sus estudios porque no todos los sectores rurales cuentan con liceos de educación media, tanto humanistas como técnicos. Consultados por la situación, desde el SLEP Elqui señalan que se encuentran en un proceso de revisión y ordenamiento tras el traspaso del mes de Julio. “SLEP Elqui está levantando información para establecer un proceso paulatino de ordenamiento en la dotación de personal proyectado en un período de seis años, tanto en sus 112 establecimientos educacionales, como en el Hogar Femenino Estudiantil de La Serena, para garantizar la sostenibilidad administrativa y financiera que debe tener el Servicio Local. En el caso del Hogar Femenino Estudiantil de La Serena, su ordenamiento dependerá de la cantidad de estudiantes de establecimientos públicos de las comunas de La Higuera, La Serena, Vicuña y Paihuano, que conforman el territorio de SLEP Elqui y que requieren residencia, alimentación y acompañamiento para mantener su trayectoria educativa”, indicaron. De esta forma, el futuro del internado Gabriela Mistral sigue siendo incierto, y tanto los estudiantes como sus familias esperan que las autoridades definan con prontitud la continuidad de un servicio que ha permitido el acceso a la educación media a niñas y jóvenes de diversos rincones de la región.




