Casi todos los sospechosos del brutal triple asesinato que conmocionó a Argentina el mes pasado se encuentran ahora en prisión preventiva, aunque algunos siguen prófugos, dijo el jueves el fiscal que dirige la investigación.
El fiscal Adrián Arribas dijo a los periodistas que nueve personas –que representan “casi el 100 por ciento” de los autores directos– estaban detenidas, aunque se negó a especificar los cargos que enfrentarían.
Los detenidos están bajo investigación por la brutal mutilación y asesinato de dos mujeres jóvenes y una adolescente cuyos cuerpos fueron descubiertos el 24 de septiembre, caso que desencadenó protestas masivas organizadas por grupos feministas y organizaciones de derechos humanos.
Entre los detenidos se encuentra Tony Janzen Valverde Victoriano, alias ‘Pequeño J’, un peruano de 20 años sospechoso de planear el crimen.
Valverde fue arrestado en Perú a principios de este mes y está a la espera de ser extraditado a Argentina, un proceso que se espera que demore varios meses.
Otro sospechoso, Matías Ozorio, un argentino de 28 años que se cree que es el lugarteniente de Valverde, fue expulsado de Perú la semana pasada después de ser capturado mientras intentaba huir.
Otros dos sospechosos son objeto de órdenes de detención internacionales, añadió Arribas, jefe de la Fiscalía de La Matanza.
Los cuerpos de las primas Morena Verdi y Brenda del Castillo, ambas de 20 años, junto con Lara Gutiérrez, de 15, fueron encontrados enterrados en un patio cercano a una casa en Florencio Varela, en la periferia sur de Buenos Aires, cinco días después de su desaparición.
Funcionarios del gobierno de la provincia de Buenos Aires dijeron que las víctimas fueron atraídas a un automóvil con el pretexto de asistir a una fiesta. Fueron torturados antes de ser asesinados en una sesión grotesca transmitida en vivo a través de las redes sociales a 45 miembros de un grupo cerrado, aparentemente como un acto de disciplina interna.
Los fiscales dijeron que el motivo fue un presunto robo de cocaína, afirmación que las familias de las víctimas han negado.
“Según nuestra línea de investigación, se trataría de unos tres kilos”, dijo Arribas el jueves, añadiendo que estaban previstas nuevas búsquedas.
Una declaración clave hecha el miércoles por una de las sospechosas que, según su abogado, no estaba presente en el lugar en el momento del crimen.
El sospechoso “ayudó a aclarar en cierta medida los roles” de los investigados, añadió el fiscal.
Medios locales informaron que la sospechosa era Celeste Magalí González Guerrero, la inquilina del inmueble donde fueron encontrados los cuerpos.
Guerrero alegó en su testimonio -visto por la agencia Noticias Argentinas- que las víctimas habían robado cocaína a un traficante llamado Lázaro Víctor Sotacuro.
Afirmó que Sotacuro está “por encima” de Valdeverde en la red del narcotráfico y mató al trío de víctimas
Sotacuro, según fuentes policiales, se presentó como taxista pero sería uno de los cabecillas del operativo.
La detenida dijo que no conocía de antemano el complot para matar a las jóvenes.
Guerrero confirmó que las víctimas pensaron que los llevaban a una fiesta y que los asesinatos fueron transmitidos por la aplicación Zangui.
Un informe policial al que tuvo acceso Noticias Argentinas descubrió que Valverde ingresó a Argentina la tarde del 28 de agosto y viajó, junto con otras dos personas, en el ferry Buquebus procedente de Uruguay.
“Sobre la acera de la Avenida Antártida Argentina se observa a tres individuos del sexo masculino, dirigiéndose hacia el ingreso al mencionado estacionamiento, quienes serán identificados como NN1, NN2 y NN3”, detalla el informe al que tuvo acceso la agencia Noticias Argentinas.
Los investigadores ahora buscan determinar las identidades de dos individuos que fueron vistos acompañando a Valverde, para establecer si estuvieron involucrados en los asesinatos.
Fuentes policiales dicen que la Policía de la Provincia de Buenos Aires ha identificado a dos sospechosos adicionales que quieren interrogar: Alex Roger Ydone Castillo y David Gustavo Morales Huamani, conocido como ‘El Loco David’ o ‘Tarta’.
La policía también busca a Manuel David Valverde Rodríguez, tío del ‘Pequeño J.’
– TIMES/AFP/NA
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