La Lanza del Sur o la escala amenazadora de EEUU: la mirada de los analistas políticos

El mensaje enviado por el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, la noche de este jueves 13 de noviembre revolvió más las aguas, ya más que turbias por la anunciada llegada del portaaviones USS Gerald Ford al Caribe, como parte del despliegue militar para el combate al narcotráfico. “El presidente Trump ordenó acción y el Departamento de Guerra está cumpliendo. Hoy estoy anunciando la Operación “Lanza del Sur”, expresó el jefe del Pentágono en su cuenta de la red X, con lo que aumentaron los rumores y expectativas. Hegseth agrega, sin dar mayores detalles, que la operación es dirigida por el “Grupo de Tareas Conjunto Lanza del Sur” y el Comando Sur de EEUU. “(…) esta misión defender nuestra Patria, eliminar a los narco-terroristas de nuestro hemisferio y asegurar nuestra Patria Patria de las drogas que está matando a nuestra gente. El Hemisferio Occidental es el vecindario de América y lo protegeremos”, remató el secretario. Para analistas consultados por Efecto Cocuyo, la narrativa, al igual que las acciones, es fundamental en cualquier conflicto para “descolocar” al adversario. Esto, sin hacer pronósticos de lo que podría seguir al mensaje del alto funcionario norteamericano porque la agenda de la política exterior del presidente de EEUU, Donald Trump, afirman, sigue sin estar clara. “Escalada amenazadora” “Ponerle nombre a la operación, Lanza del Sur, da un paso más allá, lo que no nombras no existe. Cuando se le pone una denominación estás creando una cosa más visible, más tangible. Es un paso más en la escalada amenazadora, en la escalada belicista”, señala la consultora política Carmen Beatriz Fernández. La comunicación es un “insumo” potente de cualquier ejercicio bélico y los actores en conflicto lo saben y así lo manejan, apunta Fernández.“Ambas cosas van juntas. No ahora, siempre. La comunicación hacia adentro y hacia fuera, interna y externa, es parte importanteísima de cualquier incidente bélico”, agregó. Tras lo hablado por el secretario de Guerra de Trump, los comentarios corrieron como pólvora, desde los que consideraron que salía más humo blanco desde la Casa Blanca hasta quienes anticiparon próximas y más contundentes acciones militares por parte de Washington contra los carteles de la droga, entre quienes incluyen a la administración de Nicolás Maduro. Hegseth fue Rusia El portavoz presidencial, Dmitri Peskov, expresó la “confianza” del Kremlin “en que no se adopte ninguna acción que pueda conducir a la desestabilización de la situación en la región del Caribe y en torno de Venezuela, y que todo se haga acorde al derecho internacional”. Alimenta incertidumbre Para la politóloga María Isabel Puerta Riera, el mensaje del secretario Hegseth alimenta más incertidumbre sobre lo que pueda ocurrir producto del despliegue aeronaval en el Caribe, que cumplirá tres meses el 19 de noviembre “El tuit hace que parezca inminente una invasión (a Venezuela), pero es por la incertidumbre. Si estuviéramos en otro contexto se podrían trazar más escenarios, pero en este no me atrevo a decir si Trump se va a mover o no más allá del Caribe. Pero es evidente que también se beneficia de la opacidad y la incertidumbre. No es un error, es intencional”, sostuvo la profesora de Ciencia Política. Voces como la del asesor principal para Venezuela del Atlantic Council, Geoff Ramsey, advirtieron que la denominación “Southern Spear” (Lanza del Sur) también fue empleada por EEUU el 28 de enero de 2025 para anunciar el despliegue de sistemas robóticos en el área de responsabilidad del Comando Sur (que abarca América Latina) para apoyar la detección y monitoreo del tráfico ilícito de drogas. defensa, seguridad, fronteras y migración en la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), Adam Isacson, aseguró que la denominación es aún más antigua, noviembre de 2017, cuando se anunció una cooperación militar entre Colombia, Perú y EEUU, contra el narcotráfico y el terrorismo. Más de uno se preguntó si se trataba de “otra lanza” y se criticó al secretario de Guerra por lanzar como nuevo algo que ya existe. del Sur para adaptarla al operativo en el Caribe. Otras versiones que corren en el ambiente estadounidense, mencionaron, es que el gobierno busca distraer la atención del caso del magnate financiero acusado de tráfico sexual de menores de edad, Jeffrey Epstein, y la supuesta relación con Trump. El mismo día el medio The New York Times publicó un trabajo titulado: Después del distanciamiento de Trump, Epstein dijo que podría ‘acabar con él’.Encrucijada El mensaje del jefe del Pentágono también se produjo el mismo día en que la cadena CBS News publicó que altos mandos presentaron a Trump opciones para ataques militares en Venezuela. “Aunque no se ha tomado una decisión final, dos fuentes confirmaron a CBS que las opciones están siendo evaluadas para su ejecución en los próximos días”, publicó la cadena estadounidense. Este 14 de noviembre, EEUU divulgó las primeras imágenes del Grupo de Ataque del Portaaviones 12 (Carrier Strike Group 12), liderado por el USS Gerald R. Ford (CVN-78), en aguas del océano Atlántico, en la entrada del mar Caribe, escoltado por aviones, entre ellas un bombardero B-52 Esto dio pie para que expertos en seguridad y militares afirman que EEUU se está preparando para eventuales ataques a objetivos en tierra. Puerta Riera sostiene que Trump se encuentra en una difícil encrucijada porque una operación militar en suelo venezolano no es apoyada, aseguró, ni por su base política, ni por el Congreso de EEUU ni por la mayoría del electorado norteamericano, según sondeos de opinión, por los enormes costos de un conflicto. bélico.Pero si no logra un cambio político en Venezuela, de ser el objetivo de las presiones militares más allá del narcotráfico, apuntó, también parecerá “vencido” por la administración de Maduro. A Trump, recalcó, “no le gusta perder”. “La agenda de Trump es unilateral, pragmática, transaccional, por lo que tampoco se puede descartar que llegue a un acuerdo con Maduro por el tema petrolero. Trump no es un estadista y puede que venga una invasión, pero también un acuerdo energético”, advirtió.Mientras, observa, Miraflores no da un paso atrás ni los que lo sostienen, ante las supuestas pretensiones de obligarlo a negociar una salida pacífica del poder por voluntad propia o por intervención de la Fuerza Armada (Fanb), pero “tampoco al frente”. “Uno de los objetivos de EEUU con la presión puede ser también provocar a Maduro para que cometa un error que facilite una acción de EEUU, pero en lugar de eso se victimiza como ha hecho con las sanciones internacionales, llevando a otros actores a rechazar el despliegue militar en el Caribe, tal como lo hace Lula (presidente de Brasil), aunque no cierren filas en defensa de Maduro”, agregó.